Fecha: 17-ago-2007
Hora: 19:51
Aumentar en 30 soles el salario mínimo para establecer un pacto social, es como "eliminar la renta básica" duplicando el tiempo de llamada en teléfonos públicos cuando se pone una moneda de sol; o decir que es "libre" la desafiliación de las AFP, sólo cuando cumple más o menos 60 requisitos; o que los derechos laborales se restablecerán cuando la CONFIEP y la CGTP lleguen a un consenso.
Ya deberíamos haber entendido que Alan no es mentiroso, es engañoso. Para mentir nadie como el estratega Fujimori. Dijo "no schock", e hizo el peor schock de la historia mundial; aseguró que no cerraría el parlamento y llegó el 5 de abril; denunció a los que querían privatizar Petroperú, respondiendo a "no se qué intereses", y privatizó los campos petroleros, la refinería La Pampilla y todo el sistema de transporte almacenamiento y distribución petrolera; aseguró a los familiares de los rehenes y al país, que no usaría la fuerza para entrar a la casa del embajador del Japón, mientras construía el túnel por el que pasarían las tropas de Montesinos; se comprometió a no ir a una segunda reelección y ahí lo tuvimos de re-reeleccionista el año 2000.
Pero Alan es otra cosa. En los 80 ya nos había mostrado como era lo suyo. Se empeñó en lo del tren eléctrico para ganar las municipales de 1986, y como resultado tenemos un tren de dos kilómetros que no funciona, una plataforma elevada que avanza unas veinte cuadras, columnas ahora decoradas que adornan una parte de Lima. Declaró solemnemente que no pagaría más del 10% de las exportaciones en deuda, pero año a año superó este porcentaje, pero lo más interesante es que consiguió que el FMI lo pusiera de modelo de lo que le pasa a los países que no cumplen con ellos. Estatizó la banca por no contribuir al desarrollo, y los banqueros se convirtieron en los años siguientes y hasta hoy día en intocables, al punto que uno de ellos ya es ministro de su gobierno.
En los 2000 es igual. Dice que va a descentralizar su gobierno, pasa una semana entre Piura y Chiclayo, y luego se olvida del asunto. Ofrece "Sierra Exportadora" en su primer discurso y la obvia en el segundo, porque la sierra sigue exportando lo que siempre ha hecho y el señor Benza tiene cada vez más opositores, entre ellos al ministro de agricultura. Lo mismo con los "aportes mineros", que sustituían los impuestos. El nuevo sistema de adquisiciones, asesorado por el Banco Mundial, etc. ¿Cómo no sentir vergüenza de que otra vez nos agarró a todos, con eso del pacto social que comenzaba con un acuerdo entre empresarios y trabajadores para un nuevo sueldo mínimo? Por enésima vez la grandilocuencia engendró un insignificante ratón, que corre bajo la mesa.
Entonces la manera como los trabajadores y los sectores que todavía no participan del crecimiento, lograrían una mejora sería a través de un "pacto social", que comenzaría en un acuerdo por un salario mínimo más digno. Eso era, ¿no? Bueno pero no lo tomen tan al pie de la letra. Comprendan que se trata de García.
06.08.07